Una de las apariciones más llamativas en el elenco estelar que Woody Allen reunió para su última película "Medianoche en París" es el debut de la Primera Dama francesa Carla Bruni en el cine.
Ver a Bruni en otra facetas alejada de la rigidez del protocolo gubernametal francés no es raro. Hasta antes de su bullado matrimonio con Nicolás Sarkozy, Bruni desarrolló una destacada carrera como modelo durante los '90 y posteriormente se inició como interprete y compositora, con tres discos editados hasta la fecha. Si bien en estricto rigor la Primera Dama francesa ya había aparecido en cintas como "Unzipped"(1995) y "Paparazzi"(1998), que básicamente se redujeron a cameos, Woody Allen le dio la oportunidad de interpretar su primer papel, aunque pequeño, en la nueva película "Medianoche en París". En ella, Bruni encarna a la guía turística del Museo Rodin de París, lugar que visita el matrimonio interpretado por Owen Wilson y Rachel McAdams. Allen señaló que algunos dijeron que la quise sustituir, y ni se me ocurrió. Todas las escenas que escribí para ella están en la película. No la impuso su marido. Él vino un momento, y una sola vez, al plató. Además, pasamos un momento excelente con él. Los dichos se refieren a los rumores de la inexperiencia de Bruni ante la cámara, que la habría obligado a repertir hasta 35 veces una escena.
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